Los antimicrobianos (antibióticos) son medicamentos que se usan para tratar infecciones de origen bacteriano. Estos medicamentos son esenciales para proteger tanto la salud humana como animal.
El uso excesivo o inapropiado de los antimicrobianos puede llevar a la aparición de bacterias resistentes que no responden al tratamiento, como se ha visto en las ultimas décadas. Este fenómeno llamado resistencia antimicrobiana, significa una amenaza para el control de enfermedades en el mundo.
La resistencia a los antimicrobianos causa aproximadamente 700.000 muertes anuales en todo el mundo y, si no se aborda adecuadamente, el numero podría aumentar a 10 millones por año para el 2050.
En el mundo actual, la globalización genera una intensificación de las producciones animales, lo que incrementa el uso de antibióticos, y en consecuencia aumenta también la resistencia a ellos.
Debido a que la globalización disminuye las fronteras entre los países, se intensifica el comercio y se facilita la transmisión de la resistencia desde los alimentos de origen animal hacia los humanos. Esta transmisión puede ocurrir tanto por infección con la bacteria resistente como por la transmisión de sus genes de resistencia.
Los veterinarios debemos formar parte de la solución, educando sobre el uso responsable y prudente de estos medicamentos e implementando tratamientos correctos en los animales.
Cada uno de nosotros tenemos un rol que desempeñar en la lucha contra la resistencia antimicrobiana y al hacerlo, podemos proteger la eficacia de estos tratamientos y con ello también proteger nuestro futuro.